Juan Andrés George tiene nueve años y lo están salvando en el Hospital Niño Jesús de Madrid, donde es paciente casi que desde el mismo día en que aterrizó con su madre en el Aeropuerto de Barajas.
Ella lo sacó de Venezuela luego de enfrentarse contra la corrupción de los hospitales públicos donde le pretendían cobrar por un catéter sin ofrecerle esperanzas de vida. Desde febrero de 2017 Juan Andrés recibe quimioterapia.
La madre está mucho más serena porque sabe que su hijo ya no se va a morir como se lo habían diagnosticado en Venezuela. Allí, hubo médicos que erraron en el diagnóstico pensando que el tumor era una hinchazón producida por algún golpe. Pero también hubo médicos que acertaron con la enfermedad del cáncer que padece el niño y que le recomendaron a la madre que lo sacara cuanto antes del país porque no habría esperanza para su vida.
Juan Andrés vive, y si todo sale como parece indicar su tratamiento, seguirá viviendo por muchos años.
Fuente: Noe Pernía